Luego de que el presidente Donald Trump amenazó con imponer aranceles a México si no cumple con el envío de agua a Texas y de que la mandataria mexicana, Claudia Sheinbaum, anunció el envío inmediato del líquido a los agricultores, Estados Unidos ve un avance en el conflicto por este tema, pero indicó que necesita soluciones.
Brooke Rollins, secretaria estadounidense de Agricultura, posteó en X que “esto es un avance. Pero lo que queremos, y lo que los agricultores estadounidenses merecen, es una solución”.
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, prometió el viernes la “entrega inmediata” de agua a Texas tras los reclamos del mandatario estadounidense, quien advirtió el jueves de sanciones a México por “violar” el Tratado de Aguas binacional.
“A los agricultores de Texas, que son quienes están pidiendo el agua, va a haber una entrega inmediata de un número determinado de millones de metros cúbicos que se puede dar, de acuerdo con la disponibilidad de agua que exista en el (río) Bravo”, expresó la gobernante mexicana.
Sheinbaum descartó este viernes que vaya a haber un conflicto o una renegociación del Tratado de Aguas de 1944, después de que Trump alertó de represalias contra México por deberle más de mil 600 millones de metros cúbicos de agua a Texas.
“No lo creo (que haya sanciones), como sabemos, es la manera también de comunicar del presidente Trump, pero hay una mesa de trabajo y (también) para fortalecer la comunicación”, sostuvo.
La tensión aumentó tras un pronunciamiento de legisladores texanos en marzo, cuando instaron a Trump a incluir en las negociaciones sobre aranceles con México una presión adicional para que cumpla con la distribución fronteriza del líquido, al citar pérdidas de unos 993 millones de dólares anuales en el sur de Texas.
La mandataria sostuvo que México ha estado cumpliendo con el acuerdo en la medida de lo posible ante la sequía en la región, por lo que la Comisión Internacional de Límites y Agua “está buscando propuestas técnicas que permitan que ese tratado se cumpla”.